El presidente Tomás Estrada Palma tenía fijado el término de su administración en 1906, sin embargo, se aferró a la idea de la reelección. Para garantizar su continuidad en el poder, emprendió acciones encaminadas a neutralizar a sus oponentes. El proceder fraudulento y violento del primer mandatario, provocó el alzamiento de los miembros del Partido Liberal. De esta forma se iniciaba, el 17 de septiembre de 1906, la “Guerrita de Agosto”.
Estrada Palma no solo erró al provocar una insurrección en su contra, sino que fue incapaz de controlarla y, para agravar la situación, solicitó la intervención militar de los Estados Unidos de América.
Ante la escalada de acontecimientos y la persistencia del presidente cubano en la opción intervencionista, las autoridades norteamericanas ordenaron el envío de sus tropas, el 27 de septiembre. En esa fecha zarparon desde la nación norteña, los acorazados New Jersey y Virginia, y los cruceros Cleveland, Minneapolis y Tacoma. Al día siguiente, renunciaron a sus funciones Estrada Palma, su vicepresidente y el gabinete presidencial. Por su parte, el Congreso de la República, no eligió un nuevo mandatario. Encontrándose Cuba sin gobierno, fue inevitable la segunda intervención norteamericana.
El 29 de septiembre de 1906, William H. Taft declaró oficialmente la intervención militar de Cuba. Permaneció en el país por poco tiempo, realizando labores de pacificación junto a 5 600 marines. En la proclama “Al Pueblo de Cuba”, condicionó la duración de su mandato al momento en que se restableciera “el orden, la paz y la confianza pública”, procediéndose entonces a la celebración de elecciones presidenciales. Bajo su administración quedaron las estucturas de dirección civil y militar del país, para lo cual brindó instrucciones precisas y supervisó frecuentemente su funcionamiento en todos los niveles.
El 13 de octubre, Charles E. Magoon relevó a Taft en sus funciones y fue nombrado Gobernador Provisional, hasta el termino de la intervención. Sus objetivos estaban encaminados a apaciguar las distintas fuerzas políticas, satisfacer reclamaciones y estabilizar el país, pero el autoritarismo y la corrupción caracterizaron su gestión.
Entre 1906 y 1909, Magoon utilizó indiscriminadamente el tesoro nacional. De un total de 24 millones de pesos que recibió, al culminar su administración solo quedaban, aproximadamente, 3 millones, y una deuda de 11 millones. En este período proliferaron, en el ámbito político y administrativo, los sobornos, los otorgamientos de “botellas”, las irregularidades en algunas transacciones, los encarcelamientos arbitrarios y el lucrativo otorgamiento de indultos. Si bien no logró contener el aumento de la delincuencia urbana y rural, sí reprimió numerosas huelgas obreras.
La creación del Ejército Permanente, con más de 2 mil efectivos y un alto costo para el erario público cubano, fue una de las iniciativas de Magoon. Por su parte, las tropas interventoras norteamericanas, organizadas en el “Ejército de Pacificación de Cuba”, ocuparon las zonas donde existían inversiones estadounidenses. A la par de proteger los intereses de su país, estos militares protagonizaron hechos vandálicos que provocaron el rechazo de la población. Las manifestaciones populares contra la intervención derivaron en alzamientos en localidades de Pinar del Río, Las Villas y Oriente.
Para normar el funcionamiento del sistema político y calmar la oposición popular a la ocupación extrajera, se creó la Comisión Consultiva, por el Decreto no. 284 del 24 de diciembre del 1906. Esta comisión estuvo presidida por Enoch H. Crowder, e integrada por funcionarios cubanos y norteamericanos. Juan Gualberto Gómez, que fue su vocal secretario, influyó en el logro de importantes avances en asuntos como el sufragio universal y la autonomía municipal. De igual forma, se aprobaron un grupo de leyes complementarias a la Constitución de 1901. Entre estas, se pueden citar la Ley del Poder Judicial, la Penal Militar, la del Servicio Civil, la Electoral, las de los municipios y las provincias, y las leyes Orgánicas del Poder Ejecutivo.
Al lograr sus objetivos, Magoon ordenó la celebración de elecciones generales. José Miguel Gómez resultó vencedor en los comicios del 14 de noviembre de 1908. El 28 de enero de 1909, asumió la presidencia y con su envestidura cesaba la intervención militar.
La Segunda Intervención fue resultado del derecho que le otorgó la Enmienda Platt a los Estados Unidos para intervenir en los asuntos internos de Cuba, demostrándose la fragilidad de su soberanía. Además, se evidenció la incapacidad de los partidos políticos cubanos para dirimir pacífica y democráticamente sus diferencias. La injerencia norteamericana afectó el sentimiento patriótico independentista y la moral del pueblo cubano, provocando manifestaciones de descontento y enfrentamiento contra los interventores.
El Archivo Nacional de la República de Cuba, posee fondos documentales y colecciones fotográficas que brindan datos e información sobre este acontecimiento. En ese sentido, resulta significativo el fondo institucional Comisión Consultiva (1907-1909), que tiene un volumen de 20 legajos y 15 libros. Como parte de esa documentación, se pueden encontrar correspondencias sobre la Ley de Contabilidad Municipal, nombramientos para escribientes de la Comisión, libros de actas de las sesiones, y libros de entradas y salidas de comunicaciones, entre otros asuntos y tipologías documentales. Además, los fondos Secretaría de la Presidencia y Secretaría de Estado y Justicia, pueden ser útiles, igualmente, para los usuarios interesados en este período de la historia nacional.

MSc. Iván Dalai Vázquez Maya
Investigador Agregado
Archivo Nacional de la República de Cuba

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